El mercado de seguros mueve hoy, en la Argentina, unos 180 millones de dólares en primas, lo que equivale a una superficie asegurada de 18 millones de hectáreas. Con esos valores, dice la coordinadora de la Oficina de Riesgo Agropecuario (ORA), Sandra Occhiuzzi, estamos "casi a la par de Brasil".

Sin embargo, los seguros presentan en Argentina algunas particularidades: el 97 por ciento corresponde a seguro de granizo o granizo con adicionales; el 50% de la superficie asegurada está sembrada con cereales y oleaginosas; y el 96,6% del volumen de primas corresponde a cultivos anuales, concentrados en la región pampeana. En las economías regionales, no obstante, el uso de coberturas es "escaso".

“Hay un mercado desarrollado pero con una orientación muy clara a un tipo de seguro en particular”, evaluó Occhiuzzi en diálogo con Infocampo. Los seguros multirriesgos, por ejemplo, representan menos del 4%.

Con estos números sobre la mesa, la cartera agrícola nacional, junto a los distintos gobiernos provinciales, están trabajando en el diseño de programas para mejorar el acceso de los productores de las diferentes zonas extra pampeanas a seguros de riesgos. Intentarán, en este sentido, crear una ley marco para desarrollar un sistema de coberturas.

"Al tomar un seguro, los productores reducen la incertidumbre acerca de cuál será su resultado económico para la próxima campaña", consideró la coordinadora del ORA. "Una cobertura permite un recupero para continuar en la actividad en el caso que haya una pérdida siniestral", añadió.

Para el Gobierno Nacional, el incremento de los seguros significaría "abocar" los beneficios de la Ley Nacional de Emergencia y Desastre Agropecuario a "casos catastróficos". Esa norma, comentó Occhiuzzi, "hoy es el único instrumento, y por eso está un poco desvirtuada su aplicación".

El objetivo es que el Estado "debe asistir a los productores cuyos cultivos están radicados en zonas aptas", pero “hubo casos donde la emergencia se produjo por negligencia del productor”.

Cultura o costos. Los medianos y grandes productores entienden "la importancia del seguro en su ecuación económica" porque "poseen un alto grado de tecnificación e información". La situación, sin embargo, es distinta en el caso de los pequeños: "Ellos están más preocupados por cuánto se les pagará por su producción que por cómo evolucionará el clima en la próxima campaña".

Para Occhiuzzi, de todas maneras, "se está dando un cambio cultural: antes muchos pedían la aplicación de la Ley de Emergencia, y ahora solicitan que las provincias desarrollen programas de seguros".

En cuanto a los costos, la titular de ORA consideró que la toma de coberturas "suele ser lo primero que se resigna" cuando el productor atraviesa una mala situación económica. Sin embargo, teniendo en cuenta que una prima de seguro de granizo o granizo con adicionales implica el 3 o 4 por ciento de la suma asegurada, "no es una cifra demasiado importante", evaluó Occhiuzzi. En el caso de los multirriesgos, las primas llegan a un 10%. “Ese ya es un costo bien importante y, además, hay poca oferta”, añadió.

Fuente: Semanario InfoCampo